Me sumerjo.
Cierro los ojos.
Me siento tan sumamente bien..
como si pareciese un sueño.
Avanzo y, sin duda, mi sonrisa aparece constantemente.
Sólo desaparece cuando encuentro
la opción de que la felicidad es efímera.
Aún así, pienso en disfrutar, en no pensar
en lo que puedo encontrarme.
De esta forma sabré aprovechar hasta el último
suspiro de alegría.
:)